Karen Blixen nació en Rugsted, Dinamarca, en esa casa de ahí encima. Una casa junto al mar, en medio de un bosque, en esa maravilla de las maravillas que es la costa oriental de Dinamarca, al norte de Copenhague.
Ahora su casa es un museo. Allí se pueden ver algunos de sus objetos más preciados, sus fotografías, incluso las de Finch-Hutton, el aventurero del que se enamoró en África, y que en el cine fue interpretado por Robert Redford.
Dentro del bosque, después de un paseo entre árboles, en un rincón escondido, está su tumba. En el suelo una lápida. En la piedra solo su nombre, Karen Blixen. Ni fechas, ni epitafios. Solo su nombre, el que ella prefirió, con el apellido de su marido y no el suyo, Dinesen.
Un lugar de silencio. De paz. De soledad deseada. Una tumba junto al mar, en el bosque. En medio de la naturaleza.
Una casa, una granja.
"Yo tuve una granja en África..."